Revista Vbeda Revista Ibiut Revista Gavellar Diario La Provincia Semanario Vida Nueva Revista Don Lope de Sosa
Nuestra web sólo almacenará en su ordenador una cookie.<br>
Cookies de terceros.Por el momento, al utilizar el servicio Analytics,  Google, puede almacenar cookies que serán 
procesadas  en los términos fijados en la Web Google.com. En breve intentaremos evitar esta situación.
Revista Códice Redonda de Miradores Artículos Peal de Becerro. Revista anual Fototeca Aviso
y más: En voz alta Club de Lectura Saudar.es Con otra voz En torno a la palabra

Úbeda

Guía histórico artística de Úbeda. En las mejores librerías. Pulse para conocer las fuentes que nos avalan


Quizás la mejor Guía de Úbeda.

 
    

Actividades culturales de dos liceos ubetenses en 1848: Noticias recogidas en la prensa madrileña (y III)

Aurelio Valladares Reguero

en Ibiut. Año XVIII, nº 102. Julio de 1999, pp. 10-11

Volver

        

3. RÉPLICA DE LOS MODERADOS

Los calificativos del primer párrafo del artículo anterior no pasaron desapercibidos para un periódico de signo ideológico distinto, que al día siguiente ofrece a sus lectores la correspondiente réplica. Así se expresa El Heraldo (rotativo madrileño que se autotitula "Periódico Político, Religioso, Literario e Industrial") en su edición del viernes 8 de septiembre de 1848 (p. 4):

«Un corresponsal del Clamor por los cerros de Úbeda. De esta ciudad escriben a dicho periódico "que como los moderaditos somos tan intolerantes" los exaltaditos han formado un segundo liceo para no estar cerca de nosotros. ¡Grandes recursos ofrecerá Úbeda para dos liceos! Los progresistas han ejecutado la pieza En todas partes cuesen jabas. No les faltaba más que haberse pronunciado por los sainetes andaluces, cólera morbo de la moderna literatura, a los cuales cuadra perfectamente lo que leemos en una obra de declamación. Dice asi el párrafo:
"Lo que se debe clamar es porque en el teatro haya decoro. Todavía falta desterrar de los sainetes los borrachos, truhanes, andrajosos y entes de este jaez. Verdad es que muchos se retiran de las lunetas cuando empieza un tejido indecoroso del mal gusto y de la grosería: es cierto también que muchos padres sacan a sus hijas de los palcos antes que principien; pero queda un gran número de personas que celebran y se ríen de las porquerías y obscenidades que tan bien se retratan. Lo repetimos: mientras se representen ciertos sainetes, no hay ni puede haber teatro correcto ni aun decente"


La ironía del titular pone de manifiesto las intenciones del redactor de esta noticia: no admite lo de "moderaditos" (calificativo al que responde con el de "exaltaditos"), considera inoportuno que haya en Úbeda dos liceos y rechaza los "sainetes andaluces", con referencia expresa a la obra de Sanz Pérez, cuya representación había elogiado el periódico liberal. Pero obsérvese que este rechazo no obedece a razones estéticas (que se podrían, más o menos, asumir), sino estrictamente morales. Vemos, pues, cómo el teatro, incluso el de signo costumbrista, se convierte en motivo para los enfrentamientos ideológicos. Nihil novum sub sole, que diría el clásico.

4. CONTRARRÉPLICA DE LOS LIBERALES

El ataque había sido tan directo que difícilmente iba a quedar sin respuesta. Tardó algún tiempo, casi un mes; pero ello dio lugar a encontrar la mejor razón para rebatir los argumentos esgrimidos: el nuevo Liceo, a petición del público ubetense, repitió, con redoblado éxito, la puesta en escena de la pieza dramática del gaditano. Y, para mayor abundamiento, un teatro madrileño había abierto sus puertas con la referida obra. En definitiva, frente a las razones de "corrección y decencia" se opone el gusto del público: la vieja lucha del mundo del teatro.

Díganselo, si no, a Lope de Vega, en su enfrentamiento a los preceptistas, o a los postbarrocos del siglo XVIII en su batalla contra los ilustrados.

De esta forma se expresaba de nuevo El Clamor Público (jueves 12 de octubre de 1848, p. 4):

«LICEO DE ÚBEDA. Nuestro corresponsal de aquella ciudad nos escribe el 810 siguiente:
El día 4 se dio la segunda función por la sociedad del nuevo Liceo, y a pesar de cuanto El Heraldo dijo el 8 de setiembre criticando la piececita de En toas partes cuesen jabas, tenemos el gusto de anunciarle que se repitió a instancia de muchísimas personas que corren por ilustradas. Desagradable deberá serle la noticia al periódico de la situación; pero no podemos excusarnos de decirle que todas las localidades estuvieron ocupadas, y que el público se entusiasmó al principiarse la pieza andaluza tanto como la vez primera; y por más cuidado que tuvimos para ver si alguno abandonaba su palco o luneta, no observamos más que placer y satisfacción en todos los espectadores.
Muy raro es en verdad, que el Heraldo se ponga de tan mal humor porque los liceístas de Úbeda representen la graciosa pieza del señor Sanz Pérez, cuando el mismo día que esto critica, se anuncia en todos los periódicos de la corte la apertura de uno de los teatros ofreciendo dar en la primera representación En toas partes cuesen jabas. No sabíamos nosotros, hasta ahora que el Heraldo se ha tomado el trabajo de decírnoslo, que en Madrid no hay teatros correctos ni decentes porque ponen en escena estas piezas andaluzas. Si esto lo dijese un extranjero que ignorase las costumbres de ciertas provincias de España, se le podría dispensar el atrevimiento; pero para el Heraldo, periódico que cuando menos se imprime en España, no hallan disculpa ningunos de cuantos han visto la representación y leído la censura. Por lo demás, el periódico moderado debe saber, que Úbeda es susceptible de tener dos liceos, y la prueba mejor es, que los hay y dan sus funciones de vez en cuando con un éxito bastante regular.
»

¿En qué quedó esta polémica? ¿Continuaron con sus actividades los dos Liceos ubetenses? ¿Hasta cuándo? De momento nada puedo responder a estas preguntas. Quizá algún día me encuentre en la prensa madrileña noticias perdidas en el olvido que nos aclaren estos y otros pormenores. Es posible también que haya alguien que sepa algo más del asunto o se anime a investigarlo. Por mi parte, lo que hasta ahora he conseguido averiguar sobre el particular aquí queda reseñado.

AURELIO VALLADARES REGUERO